Las compras con tarjetas de crédito y los préstamos en pesos registraron un nuevo retroceso en enero, al quedar notoriamente por debajo de la inflación, según un informe de First Capital Group.
La retracción del consumo frente a la disparada de los precios, que se acentuó durante las últimas semanas, se vio reflejada en los menores gastos con las tarjetas de crédito.
Mientras las compras con plásticos generaron un movimiento de $5.966.247 millones, lo que implica una suba de un 11,1% nominal respecto a diciembre, los precios treparon en torno al 20% en el mismo periodo.
Algo similar sucede en la variación interanual, ya que el aumento del stock de deuda contraída con plásticos fue de 160,7% quedando nuevamente por debajo de los niveles de la inflación anual, arrojando en consecuencia una baja en términos reales.
Ante este panorama y con el objetivo de reactivar el consumo por este medio de pago, el Gobierno lanzó recientemente el programa Cuota Simple, que permite comprar productos y servicios con tarjeta de crédito en 3 o 6 cuotas fijas con una tasa de interés especial.
La iniciativa oficial entró en vigencia el 1° de febrero y estará disponible hasta el 31 de mayo. “Se espera que la utilización del programa Cuota Simple permita recuperar la cartera de tarjetas. La suba de los valores de los productos va más rápido que los ingresos de los tarjetahabientes y por consecuencia, que las actualizaciones de los límites de crédito, por este motivo se dificulta el crecimiento en términos reales de la cartera”, explicó Guillermo Barbero, socio de First Capital Group.
Préstamos
Por el lado de los préstamos al sector privado, el mes pasado alcanzaron un nivel total de $17,3 billones, representando una suba interanual de $10,1 billones, equivalente al 138,9%. Al igual que sucede con las compras con tarjetas de crédito, el aumento quedó por debajo de la inflación del período.
En este sentido, Barbero aseguró que “el sector privado se aleja de los bancos como su fuente de financiación y se hace ver un fuerte ajuste sobre los valores de la actividad, para muestra de ello basta considerar que el total de las financiaciones al sector privado en pesos que otorga todo el sistema financiero está por debajo de los USD15.000 millones medidos a la cotización del MEP”.
La línea de préstamos personales aumentó en términos nominales durante el mes en un total de $139.921 millones. Aunque esto evidencia un repunte en las colocaciones, al contrastarse con la inflación, el aumento fue de sólo del 7,2% y quedó lejos de representar un crecimiento en términos reales.
En el acumulado anual el crecimiento fue del 160,7% al ascender a los $2.095.093 millones contra los $1.120.652 millones al cierre de enero del año anterior. Dicha variación también quedó por debajo de la evolución de precios.